Los cálculos de Miller para 1843-1844

Daniel en la Capilla Sixtina

Si usted piensa que la Biblia puede tener razón, siga leyendo. Puede resultarle interesante este asunto de las profecías que acompañaron la aparición de Jesús hace dos mil años y ahora.

Es triste pensar que el cuerpo del amado Jesús esté flotando en algún lugar del cielo y que descenderá sentado en una nube. Siempre me ha parecido que esa interpreación literal está muy lejos de lo que debe ser. Es una visión tipo Hollywood muy lejos de lo apropiado si consideramos cómo vino la primera vez.

Como sabemos, las profecías que acompañaron la llegada de Jesús hace dos mil años se cumplieron simbólicamente y no literalmente: que se sentaría en el trono de David; que traía una espada entre varias otras señales.  Los judíos, al esperar que se cumplieran literalmente perdieron el bote.

Los hermanos cristianos que esperan la venida literal de Jesús están perdiendo el bote también. La interpretación literal es totalmente fuera de toda razón. Un consejo que nos dió Issac Newton, un cristiano sincero además de científico importantísimo, es muy bueno: Si algún versículo bíblico está en desacuerdo con la ciencia debe interpretarse simbólicamnete.

William Miller

William Miller fue un destacadísimo predicador del siglo 19 que anunció la venida de Jesús para el período 1843-1844. Miles lo siguieron. En Persia, otros profetizaron Su venida en la misma fecha.  Tuvieron la fecha bien pero esperaban una llegada literal y espectacular: descendiendo del cielo, con trompetas, los muertos se levantarían de sus tumbas, y todo ojo le vería… ¿en todas partes del mundo?

Si se toma simbólicamente, las cualidades de Jesús aparecieron en la persona de un joven de 25 años en Shiraz, Persia (la Elam bíblica). Y como la primea vez, vino tranquilamente y no de forma espectacular.

Aquí están los cálculos que hizo Miller:

Miller,después de un estudio concienzudo y detallado de la Biblia encontró que la segunda venida de Jesús debería ocurrir entre el 21 de marzo de 1843 y el 21 de marzo de 1844. ¿Cómo llegó a esas fechas? ¿Por qué las buscó en Daniel? Todo esto aparece en Mateo 24, llamado también “el pequeño Apocalipsis” porque en ese sermón Jesús describe lo que ocurrirá en el futuro. Ver estudio y detalles del capítulo en Wikipedia

Jesús refiere a sus discípulos a Daniel:

Mateo 24:15 Por tanto, cuando veáis en el lugar santo la abominación desoladora de que habló el profeta Daniel (el que lee, entienda), 

Y Daniel 8 nos dice que el profeta escuchó, en una visión, a dos santos hablando:

8:13 Entonces oí a un santo que hablaba; y otro de los santos preguntó a aquel que hablaba: ¿Hasta cuándo durará la visión del continuo sacrificio, y la prevaricación asoladora entregando el santuario y el ejército para ser pisoteados?
8:14 Y él dijo: Hasta dos mil trescientas tardes y mañanas; luego el santuario será purificado.

Miller usó la explicación de que cada día puede ser considerado como un año, usando citas como la de Ezequiel 4:6 y aceptada por estudiosos bíblicos. Por tanto el período es de 2,300 años y que debía comenzar en el 457 aC con el decreto de Artajerjes para que los israelitas de Babilonia regresaran a Israel y reconstruyeran el templo.

Si comenzamos a contar desde 457 antes de Cristo, debemos restar 457 a 2,300 y obtenemos 1843.

Miller pensó que el tiempo debía ser entre los equinoccios (primaveras) del 21 de marzo de 1843 y 1844.

Un dato importante, que Miller consideró después, es que en aquella época no existía el concepto de cero como lo tenemos hoy. Los números se usaban para contar y no para medir. Aunque nos parezca raro hoy día, un niño al nacer tenía un año.

Dato curioso es que tanto Daniel como Artajerjes están asociados con Elam, en la región de lo que es hoy Irán (o Persia).

Otro dato importante: En la Biblia aparece la fecha 1260 muchas veces. En el calendario musulmán 1260 equivale a 1844 en el calendario gregoriano que nosotros usamos. Averigüe. Todo está muy claro.

Es interesante saber que Miller no aceptó las interpretaciones que hicieron otros grupos. El no fundó la Iglesia Adventista. El honesto y valiente Miller se mantuvo firme y murió diciendo que sus cálculos estaban bien y que no sabía lo que había pasado.

Daniel dió sus profecías estando en Elam. Elam es hoy parte de Irán (Irán se conoció hasta hace poco como Persia). Lo más probable es que la profecía se cumpliera en Elam y no en Estados Unidos. Y así fue. La clave está en Persia (Elam). Las profecías se refieren a la declaración del Báb el 23 de mayo de 1844 en la ciudad de Shiraz en Irán.